De fiesta con nunchakus, puños americanos y sprays pimienta
Dos detenidos el viernes y dos detenidos el sábado por la Guardia Civil
Tres denuncias por violar la Ley de Extranjería
Reventaron las fiestas cuando cerró el recinto ferial a las 02.00 horas
Quemaron hasta 15 contenedores y formaron barricadas
Europa Press | Torrelodones (Madrid)
Lo que iban a ser unas agradables fiestas de verano acabaron, como hace un año en Pozuelo, con menores y jóvenes detenidos por sus ganas de bronca.
Las fiestas patronales de Nuestra Señora del Carmen de Torrelodones, Madrid, terminaron este sábado con dos menores arrestados por su presunta participación en unos disturbios que derivaron en barricadas y quema de hasta 15 contenedores.
El viernes pasó algo parecido, cuando varios altercados se saldaron con otras dos detenciones por hechos similares. No obstante, en esta ocasión se dañaron señales de tráfico, vehículos y locales comerciales situados en las inmediaciones de la calle Andrés Vergara, en la zona de la estación de Renfe.
Sin embargo, la Guardia Civil no descarta que se produzcan más detenciones y más denuncias por los daños causados en mobiliario urbano, vehículos y locales comerciales.
Además de las detenciones, la Guardia Civil se incautó de armas como nunchakus, propios de las artes marciales asiáticas, puños americanos, material pirotécnico y sprays de pimienta, entre otros elementos.
Durante los registros, los agentes practicaron 17 denuncias por posesión y consumo de drogas, diez denuncias por posesión de armas prohibidas, cinco por alteración de orden público y tres por violar la Ley de Extranjería.
El plan era 'liarla'
Los adolescentes se habían organizado mediante redes sociales para "reventar las fiestas", según ha averiguado el Ayuntamiento de Torrelodones. "Una auténtica pena", añaden fuentes del Consistorio.
Por este motivo, se dio aviso a la Delegación del Gobierno para que "estuviera vigilante". "Gracias a la adopción de esas medidas no ha ocurrido más", han aseverado.
Los alborotadores se negaron a desalojar el recinto ferial a las 2 de la madrugada, hora en la que debía cerrar por orden judicial. En esos momentos quedaban unas 200 personas a las que se les dio el aviso por megafonía de que abandonaran las instalaciones.
Fue entonces cuando se formaron tres grupos de 15 personas que las unidades de intervención GRS de la Guardia Civil intentaron dispersar con "tiros de salva" y pelotas de goma ya que cortaron calles de la zona con piedras y vallas de obra.
Respecto a la madrugada del viernes al sábado, en el recinto ferial quedaban unas 300 personas cuando se solicitó el desalojo. Se detuvo a dos jóvenes de 20 y 18 años, a los que se les acusó de desórdenes públicos y daños y alteraciones de orden público y atentado, respectivamente.
También tuvo que intervenir la unidad antidisturbios de la Benemérita. Al parecer, dichos altercados fueron iniciados por un grupo de cuatro personas que tiró botellas y vasos a los agentes de la Guardia Civil cuando se solicitó el desalojo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario