La Policía Nacional se vio obligada a cargar contra un grupo de componentes de la peña Ligallo Fondo Norte después de finalizar el partido Real Zaragoza-Osasuna cuando trataron de acercarse a la zona donde se encontraban los seguidores de los Indar Gorri que acudieron a presenciar el partido al estadio de La Romareda. Estos últimos estaban siendo conducidos por las miembros de las fuerzas del orden a los autobuses que debían llevarlos de regreso a Pamplona. En total viajaron a Zaragoza 64 aficionados de la peña radical de Osasuna y lo hicieron en un autocar y un microbús.
Durante esos incidentes hubo algunas carreras por los aledaños de La Romareda, pero la Policía Nacional no tuvo que realizar ninguna detención. Después, un grupo de seguidores del Ligallo golpearon a una persona que se encontraba por la zona al confundirla con un Indar Gorri. Los aficionados radicales de Osasuna llegaron con retraso al encuentro y las fuerzas del orden los tuvieron controlados desde hicieron apareciendo en las inmediaciones del estadio municipal. El partido entre el Zaragoza y Osasuna había sido declarado de alto riesgo. En el encuentro de pretemporada disputado entre ambos equipos en la localidad navarra de Tafalla componentes del Ligallo Fondo Norte y de los Indar Gorriprotagonizaron varias peleas.
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